domingo, 24 de agosto de 2008

Ocupaciones Varias II - Personaje

Dibujarte hubiera sido más fácil que escribirte aunque ahora intente delinear con palabras un momento final y a la vez se busque evitar las huellas; así que te propongo un juego. Creemos un personaje, que para hacerlo más complicado y después de pensarlo mucho llamaré Personaje.
Personaje Niño tiene miedo y busca a su mamá, pero personaje no tiene mamá porque lo creamos vos y yo, por lo que él empieza a estar en soledad. Paralelamente Personaje No Tan Niño decide ir en busca de su mamá pero como sabe que no se puede buscar algo inexistente empieza a crear pedazos de lo que le gustaría que existiera y emprende una búsqueda de esos pedazos en otras personas, va por el mundo conociendo gente para recolectar sus piezas.
Personaje Niño quiere jugar y reírse, pero las piezas recolectadas por Personaje No Tan Niño atan de cierta forma su espíritu infantil, obligándolo a crecer, sin que él este preparado para ello.
Un día Personaje No Tan Niño se enamoró y aún no sabemos mucho de esa parte de la historia lo que nos permitirá dar un salto en el tiempo- espacio hasta un hoy más cercano.
Personaje se encontraba una noche al lado de una línea gris de pavimento rodeado de edificaciones y construcciones. A su lado derecho o izquierdo se encontró con una gran pared blanca y allí vio un rectángulo de colores que llamaré “puerta”, decidió ingresar y dentro de esa “puerta” se encontró con otros muchos rectángulos que llamaremos “varias puertas”. Personaje no sabía donde se encontraba acto seguido comenzó a mirar a su alrededor para ver si reconocía algo, hasta que se percato que arriba de cada una de esas “varias puertas” había algo escrito. La primera varias puertas de un color verde mezclado con un verde mas claro, decía: “De mi historia y de cómo ella se conecta con la tuya”; la segunda “varias puertas” de un color turquesa que en realidad no era turquesa decía: “De la razón”; la tercera, amarrilla o roja, depende de donde la mires decía: “Del amor”; y la cuarta, blanca, decía: “Del porqué de los tres puntos suspensivos”. Personaje se quedó mirando las varias puertas preguntándose a cual de ellas debía entrar o si debería devolverse por la puerta de colores. Sin saber muy bien que hacer se dirigió a su creador exclamando: ¿A cual de estas puertas debería entrar primero? (Personaje espera respuesta de su creador).


1 comentario:

Javier Pimentel dijo...

Creo que falté a los parámetros de cortesía propios de esta forma de comunicación al contestar tu comentario en mi propio blog, pero en todo caso aqui va, textualmente:

"Tienes toda la razón, no podemos hacer mucho por las manadas que tienen incrustada en su cerebro esa lógica de ser "cool", esa necesidad apremiante de sentirse parte del grupo de la gente "bien". Será preciso, tal vez, rogarle a la divina providencia, a Alá, a Buda y a los demás dioses por sus neuronas disfuncionales. Mientras tanto ellos seguiran llenando Gavanna y Gnoveva (excusa mi francés) hasta las tetas.
La iniciativa de la universidad (como tú lo dices) tambien es importante precisamente para eso: Para que nos demos cuenta, a través de un caso de discriminación tan ruin y descarado, que hay algo odioso y estúpido en esa lógica de exclusión, que no es tan "chic" eso de someterse al escrutinio de un gorila para acceder al mundo de la "diversión".
A mi, como seguro te pasa a ti, no me gusta someterme a ese tipo de escrutinios, no me gusta mendigar en demasía la aprobación de nadie.
En mi caso el asunto está mediado en cierta forma por el orgullo, pero tambien, porque todo aquello me fastidia, me repugna, se me antoja terriblemente odioso.

Gracias por el comentario."

Eres Uniandina tambien? Qué estudias? Yo estoy a punto de graduarme, así que esa coincidencia no vale.